Después
de la mala experiencia del asalto al bergantín varado en la playa,
el juez de CONIL declara el estado de sitio, pero este
periódico, a pesar del nombre de su cabecera, pretexta esta decisión
en el poco apoyo que el vecindario conileño dio a dicho juez,
candidato en anteriores elecciones a diputado provincial.
Fuente:
“El Católico”, núm. 313, del miércoles 9 de noviembre de 1842.
Otra reseña sobre esta noticia.
Fuente: “El
Castellano”, del jueves 10 de noviembre de 1842.
CONTINUARÁ en la entrada de mañana.
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