Una parte del monte público de Roche, concretamente la conocida como Barrio Nuevo, había sido desforestada y puesta en cultivo de una manera espontánea y anárquica, por unas cien familias de obreros agrícolas, que además de los cultivos anuales, se atrevieron a implantar viñas, a perforar pozos y a construir sus modestas viviendas. Ante estos hechos consumados, la Junta Central de Colonización y Repoblación Interior, presidida por Luis de Marichalar y Monreal, Vizconde de Eza, en base a unos informes realizados y a un recientemente aprobado Real Decreto, se procede, mediante este formalismo legal, a dar cobertura y regularización a una situación "de facto" intolerable, ordenando la ocupación y reconociendo la propiedad de las parcelas a aquellos que se hagan merecedores de ello por su laboriosidad y vocación. El hambre que el paro obrero traía consigo, se podría ver subsanado con esta colonización ordenada y ampliada.
He aquí un pensamiento del Vizconde de Eza de 1919, unos años antes de los hechos que se exponen:
"Únicamente interesando en la tierra al agricultor, puede éste ver despertar en su ánimo todos los sentimientos da nobleza de
alma, de serenidad de espíritu, de amor al trabajo y de persistencia en la estabilidad y orden social, que la posesión de un trozo
de tierra despierta en quien antes viviera sin reflexionar ni discurrir, a merced del embate de una predicación disolvente o de una
exaltación virulenta"
Fuente: COLONIAS AGRÍCOLAS Y POBLADOS DE COLONIZACIÓN
ARQUITECTURA Y VIVIENDA RURAL EN ESPAÑA (1833 - 1955). José Luis Oyön Banales. Tesis Doctoral. Universidad Politécnica de Barcelona, abril 1985.
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